Hay circunstancias que sin duda pueden hacerte la vida infeliz. Pero una gran parte de tu infelicidad proviene de tu propio pensamiento, de tu comportamiento y de tus hábitos. En este artículo me gustaría compartir contigo 7 de los hábitos cotidianos más destructivos que te pueden crear descontento en tu propio mundo interior. Pero también voy a compartir lo que ha funcionado y lo que en mi vida me ha ayudado a minimizar o superar estos hábitos.
4/ Compararte tú y tu vida con los demás y sus vidas
Un hábito diario muy común y destructivo es comparar constantemente tu vida y tú mismo con otras personas y sus vidas. Se trata de comparar coches, casas, puestos de trabajo, zapatos, dinero, relaciones, popularidad social, etc. Al final del día, todo esto le da una paliza a tu autoestima que la deja por el suelo creando una gran cantidad de sentimientos negativos.
¿Cómo superar este hábito? Reemplaza el hábito destructivo con otros dos hábitos.
a/ Compararte contigo mismo. En primer lugar, en vez de compararte con otras personas, crea el hábito de compararte a ti mismo. Observa todo lo que has crecido, lo que has logrado y qué progresos has realizado hacia tus metas. Este hábito tiene la ventaja de crear gratitud, aprecio y bondad hacia ti mismo mientras observas lo lejos que has llegado, los obstáculos que has superado y las cosas buenas que has hecho. Te sientes bien contigo mismo sin tener que pensar en otras personas.
b/ Sé amable. Por mi experiencia, la forma de comportarse y pensar hacia los demás parece tener un importante efecto sobre la forma en que se comportan hacia ti. Juzgar y criticar a la gente hace que se tienda a juzgar y criticarte a ti mismo cada vez más (a menudo, de forma casi automática). Ser más amable con la gente y prestar ayuda hace que tiendan a ser más amables y serviciales hacia ti mismo.
Concéntrate en las cosas positivas, en ti mismo y en las personas que te rodean. Aprecia lo que es positivo en ti mismo y en los demás. De esta manera te reconcilias contigo mismo y con la gente, en lugar de clasificarlos y crear diferencias en tu mente.
Y recuerda, no puedes ganar si te mantienes en la comparación. Simplemente date cuenta conscientemente de que esto puede ser útil. No importa lo que hagas, prácticamente siempre encontrarás a alguien en el mundo que tiene más que tú o que es mejor que tú en cualquier cosa.
5/ Céntrate en los detalles negativos de la vida
Ver los aspectos negativos de cualquier situación en que te encuentras y detenerte en esos detalles es una manera segura de hacerte infeliz. Además arrastrará hacia abajo tu estado de ánimo y el de todo el mundo que te rodea.
¿Cómo superar este hábito? Superar este hábito puede ser complicado. Una cosa que ha funcionado para mí es dejar el hábito del perfeccionismo. Debes aceptar que las cosas y las situaciones tendrán sus ventajas e inconvenientes en lugar de pensar en los detalles positivos y excelentes. Acepta las cosas como son. De esta manera puedes apartar emocionalmente y mentalmente lo que es negativo en vez de pensar en ello y hacer una montaña de un grano de arena.
Otra cosa que funciona es simplemente centrarse en ser constructivo en lugar de quejarse de los detalles negativos. Puedes hacerlo formulando mejores preguntas como:
¿Cómo puedo convertir este asunto negativo en algo útil o positivo?
¿Cómo puedo solucionar este problema?
Si me enfrento a lo que me pongo a pensar lo convierto en un problema que puede utilizar una tercera solución, entonces doy cuenta de que esto no es en absoluto un problema a largo plazo.
6/ Limitarte tu vida porque crees que el mundo gira a tu alrededor
Si piensas que el mundo gira a tu alrededor y tienes miedo lo que la gente puede pensar o decir si haces algo diferente o nuevo, entonces estás poniendo grandes limitaciones en tu vida. Puedes ser menos abierto a probar cosas nuevas y crecer. Puedes pensar que la crítica y la negatividad son acerca de ti o que todo lo que ocurre es siempre culpa tuya (aunque, en realidad, podría ser de la otra persona que tenga un mal día). También he encontrado que mi propia timidez me hacía pensar que la gente se preocupaba mucho de lo que estaba a punto de decir o hacer.
¿Cómo superar este hábito? Date cuenta de que las personas no se preocupan demasiado acerca de lo que haces o dices. Bastante tienen con preocuparse por su propia vida y lo que la gente pueda pensar de ellos. Esto puede hacer que te sientas menos importante pero también te libera bastante.
Enfócate hacia el exterior. En lugar de pensar siempre en ti mismo y en cómo las personas pueden percibirte, céntrate hacia el exterior, en las personas que te rodean. Escúchalos y ayúdalos. Esto te ayudará a aumentar tu autoestima y te ayudará a reducir ese enfoque centrado en ti mismo.
7/ Complícate la vida
La vida puede ser bastante complicada. Esto crea tensión e infelicidad. Pero gran parte de estos sentimientos a menudo son creados por nosotros mismos. El mundo se hace cada vez más complejo, pero eso no significa que no podamos crear nuevos hábitos que hagan tu vida un poco más simple.
¿Cómo superar este hábito? Complicarse la vida puede implicar muchos hábitos pero me gustaría sugerir algunos hábitos para reemplazarlo.
a/ Divide tu enfoque y pon tu atención en todas las facetas de tu vida cotidiana. Haz una pequeña lista de cosas para hacer con 2 ó 3 artículos muy importantes y anota tu meta más importante en una tarjeta blanca que verás cada día. Desecha el resto de tareas.
b/ Tener demasiadas cosas. Sustituye con regularidad ese hábito al preguntarte: ¿He utilizado esto en el último año? Si no es el caso, entonces regala esa cosa o tírala a la basura.
c/ Crear en tu mente problemas inexistentes de relación con las personas. Lees mentes es difícil, es mejor hacer preguntas y comunicarse. Esto te ayudará a reducir al mínimo los conflictos innecesarios, malos entendidos, la negatividad, el tiempo y la energía.
d/ Perderse en el ordenador. Dedica menos tiempo y energía a tu e-mail, redes sociales, etc. Revisa todo esto una vez al día y escribe correos electrónicos cortos (a ser posible de no más de 5 frases)
e/ Perderse en el estrés y abrumarse. Cuando estamos estresados, perdidos en un problema o en el pasado o en el futuro, respira con el abdomen durante dos minutos y céntrate únicamente en el aire que entra y sale. Esto te calmará tu cuerpo y traerá de nuevo a tu mente de nuevo al momento presente. A continuación, puedes empezar a centrarte otra vez en hacer lo que es más importante para ti.
