El zumo de naranja recibe algunas veces críticas y algunas de ellas merecidas. Es cierto que en ocasiones su nivel de azúcar puede dispararse hasta unos valores demasiado altos, pero también es cierto que es una grandísima fuente de Vitamina C, además de otros contenidos que pueden reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer, además que unas últimas evidencias de que los cítricos son una herramienta para proteger tus riñones.

Y ahora, un reciente estudio ha lanzado una conclusión que hará las delicias de esos amantes de los zumos. Se han encontrado conclusiones que indican que nuestra capacidad para absorber los nutrientes de las naranjas es mucho mejor cuando está en forma líquida, llegando hasta el 40% mientras que comiendo la fruta en sí, se alcanzaría un 12% de los nutrientes.

Eso no indica que ahora tengamos carta blanca para comprar cualquiera de los múltiples zumos que nos encontramos en las bandejas de nuestros supermercados, porque en ocasiones estos zumos preparados tienen unas cantidades de azúcar muy próximas a lo que pueden tener bebidas como el Red Bull, por lo tanto tendremos que ser nosotros los que hagamos nuestros propios zumos naturales, y para ello, tenemos los siguientes consejos:

Seleccionar una herramienta adecuada.

Mismamente con un exprimidor de mano, podremos sacar la suficiente cantidad de zumo, no son necesarias máquinas de precios prohibitivos.

Limpia la fruta.

Los vendedores tratan los productos, por lo que es recomendable lavar la ropa con agua tibia y jabón. Un enjuague y que se seque.

Presión correcta.

Hay que hacer rodar la naranja hacia atrás y hacia delante para conseguir que libere el máximo sabor.

Buen corte de la fruta.

Buen corte para maximizar la calidad.

Hay que realizar un corte justo por la mitad y luego ponerle el exprimidor en el centro de la naranja.