REDACCIÓN. El nuevo iPhone 8, que probablemente esté a la venta a partir de septiembre, alcanzaría los mil dólares de precio, según esperan los expertos en tecnología. El Galaxy Note 8 costaría entre los 930 y los 960 dólares, el LG V30 tendría un precio aproximado.

La tendencia de estos teléfonos inteligentes es ir incrementando su costo a un precio que años atrás parecía una locura. Pero lo cierto es que a pesar de lo costoso que parece, la gente está interesada en gastar mucho por los equipos nuevos que lanzan las compañías líderes del mercado.

En el primer trimestre de 2017, los precios promedio en el segmento premium (los teléfonos inteligentes de gama más alta) fueron de US$460, en comparación con los US$482 del mismo período del año anterior.

Sin embargo, este iPhone 8 promete reconocimiento facial que permitirá a los usuarios hacer transacciones como compras por internet, así como mejoras en la memoria RAM del aparato, visualización en pantalla, procesamiento de gráficos y otros secretos que se darán a conocer con la celebración del décimo aniversario del lanzamiento de Apple.

Pese al temor del costo, si bien las versiones “básicas” de los equipos dominaron las ventas, la gente tiende más a comprar las versiones más caras que las más baratas.