Un adolescente chino falleció menos de 48 horas después de haber ingresado a un campamento ilegal para niños adictos a Internet, ubicado en la provincia de Anhui. Según informó el periódico local ‘Anhui Business News’, el cuerpo del joven, de 18 años, tenía múltiples heridas y contusiones.

De acuerdo con la publicación, la madre de Li Ao matriculó a su hijo en la institución Hefei Positive Energy Education, que prometía ayudar a sus alumnos a través de asesoramiento psicológico y entrenamiento físico, con métodos “suaves” y sin castigos corporales.

Luego de pagar 22.800 yuanes (cerca de 3.400 dólares), por un período de 180 días, Li ingresó al campamento el pasado 3 de agosto. Sin embargo, dos días después informaron a sus padres del deceso. La causa de la muerte aún se desconoce, pero el informe forense señaló que se identificaron 20 heridas externas y signos de hemorragia interna.

Representantes del gobierno local aseguraron que dicha escuela estaba operando sin licencia y había sido advertida en junio por las autoridades para poner fin a su funcionamiento.

En China, este tipo de establecimientos correccionales son muy populares y tratan, entre otros, la adicción a los juegos de azar y las drogas. En los últimos años varias muertes asociadas a sus dudosos métodos pedagógicos, han despertado las alarmas en el país. En muchas ocasiones acuden al castigo corporal o a terapias por electrochoque, prohibidas por la legislación.

La base de entrenamiento militar Xicheng, ubicada en las afueras de Pekín, es solo uno de los más de 250 campamentos para niños adictos a Internet y a los videojuegos que funcionan en China.