El hecho de que los próximos procesadores Core i7-6700K y Core i5-6600K de Intel tengan un TDP de 95W ha hecho que más de un usuario levante la ceja con serias dudas.

Dichas dudas son algo normal y comprensible, ya que por ejemplo los procesadores Core i7 4770K, basados en Haswell y fabricados en proceso de 22nm, tienen un TDP de 84W, mientras que sus homonimos basados en Skylake tendrían un TDP mayor a pesar de estar fabricados en 14nm.

¿Quién es el culpable? Pues la GPU integrada, al menos según Intel, quien afirma que el gran incremento de potencia que supondrán las GT4e frente a las GT3e tiene como consecuencia un mayor TDP.

Ya os hablamos justo ayer sobre esa mejora de rendimiento, que en teoría es del 50%, pero debemos tener en cuenta que en la práctica el funcionamiento general de Skylake será mucho más eficiente que el de Haswell.

Así, Skylake conseguiría una reducción teórica de hasta el 60% de consumo frente a Haswell, lo que se traduciría en resultados tan interesantes como hasta un 35% más de autonomía en portátiles reproduciendo vídeo Full HD.

Fuente: http://www.muycomputer.com/2015/05/12/intel-tdp-de-95w-skylake