Santiago. Familiares, parientes, vecinos y quienes fueron amigos de  doña Ana Estela Diloné, se sumaron este martes  a la última conmemoración religiosa de su novenario.

En una expresión de solidaridad cientos de personas ocuparon  el salón de ceremonias religiosas de la parroquia San José de la Montaña, en el sector de Baracoa, para rezar y elevar cantos de alabanzas por la muerte de la madre del expelotero de las Águilas Cibaeñas, Miguel-Guelo-Diloné.

Al ritual llevaron algunos mensajes en los que llamaron la atención de las autoridades sobre este tipo de hechos.

Tras la prédica por el novenario, los moradores de La Joya marcharon por las calles Hermanas Mirabal y Anselmo Copelo, hasta llegar a la calle Del Sol, donde residía doña Estela.

Las personas mostraron carteles, en los cuales resaltaron un mayúsculo, “no más violencia”.

En la misa del novenario el predicador católico Fray Máximo Rodríguez deploró que el país esté tomado por la delincuencia y que se tenga un cuerpo policial incapaz de resolver los problemas de inseguridad que encara la población.

En su mensaje  posterior al protocolo religioso, el expelotero y símbolo del deporte dominicano, Miguel Diloné, dijo que se  siente muy agradecido de la solidaridad expresada por los pobladores de La Joya, donde vivió doña Estela toda su vida.

Dejó claro que el apoyo de los vecinos lo ha ayudado a sobrellevar una situación para la cual nunca creyó estar preparado,  es decir, la muerte de su madre, quien fue asesinada por varios hombres que penetraron para robar en su residencia ubicada en la calle Del Sol esquina Anselmo Copelo.

Diloné, hijo único de doña Estela Diloné, deploró que personas jóvenes se involucren en hechos tan horrendos, solo con la intención de tener drogas en su cabeza y manifestó que espera que si no hay una justicia terrenal para que cumplan su castigo, sea la Justicia de Dios que los sancione. “No voy a buscar venganza por mis propias manos, pero sí voy a busca por todos los medios que sean castigados”, puntualizó.

Implicados guardan un año de prisión preventiva

Por el caso sucedido la semana pasada y que consternó al país, actuantes de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Juzgado de la Instrucción han dictado un año de prisión preventiva a tres de los implicados en  la muerte de Ana Estela Diloné, madre del pelotero Miguel  Diloné.

Los afectados con la coerción son Kenny Miguel Rodríguez Durán y Andrés Martínez (El Mono) y  Marcos Joel Peña. El tribunal consideró la gravedad del hecho demostrado por el Ministerio Público, así como también la falta de arraigo de los imputados, razón que habría motivado el fallo. 

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elcaribe