La Oficina de Derechos Humanos de la ONU instó hoy a las autoridades de Arabia Saudí a realizar una investigación imparcial sobre la denuncia de que sus guardias de fronteras han matado en meses recientes a cientos de inmigrantes y solicitantes de asilo que entraron irregularmente a su territorio a través de Yemen.

Esta denuncia fue formulada por la reconocida organización defensora de los derechos humanos Human Rights Watch que este lunes acusó en un detallado informe a los agentes fronterizos de asesinar a cientos de inmigrantes, mayoritariamente procedente de Etiopía, con disparos a corta distancia o mediante explosivos.

El informe indica que estos actos no son nuevos pero parecen haber aumentado en frecuencia e intensidad.

«Estamos haciendo un seguimiento de la situación desde hace algún tiempo y es evidente de que es necesario investigar, aunque es el Estado el que tiene la obligación inicial de hacerlo», declaró el portavoz de la ONU para derechos humanos, Jeremy Laurence.

Reveló que la ONU no ha recibido autorización de las autoridades para enviar investigadores a la zona fronteriza para que puedan recoger información de primera mano.

«No hemos podido hacer esto hasta el momento, aunque repito que la primera obligación de investigar recae en las autoridades nacionales», insistió.

Reconoció que el resultado de las investigaciones de Human Rights Watch tiene un impacto evidente y aumenta «el nivel de conciencia» de lo que ocurre en la frontera saudí con Yemen, país de tránsito para los inmigrantes de la región del Cuerno de Africa, una de las más pobres del mundo y que sufre gravemente de las consecuencias del cambio climático.