Ambos equipos han sumado piezas de importancia para el tramo final de la serie regular y la postemporada de la NBA.

El mensaje es muy claro en la NBA: hay que armarse para la venidera etapa de postemporada, que por todos los lados pinta que será muy reñida. Pasó la fecha límite de cambios en la liga del mejor baloncesto del mundo, pero eso no significa que se acabaron las transacciones en aras de fortalecerse para la llamada etapa de la verdad.

Muchos equipos, sin ningún tipo de aspiraciones, aprovechan para liberarse de contratos que cargan sus nóminas, lo que es aprovechado por otros con pretensiones reales para adquirir esas piezas. Nada es garantizado. De todas formas hay que hacer el esfuerzo para sumar talento. Si la meta es llegar a las finales de Conferencia o de la liga, donde Miami Heat es favorito para regresar, hay que ir preparado con todo tipo de municiones.

Los Pacers se movieron y adquirieron a Andrew Bynum, el controversial centro que una vez fue una estrella con los Lakers, en una decisión que también incluye algo de impedir que un rival de su Conferencia Este lo consiguiera. En las guerras, no solo hay que adquirir municiones, sino que es valioso evitar que le lleguen al enemigo. En un momento, Miami estuvo interesado en Bynum.

Luego, la escuadra que tiene como cerebro del departamento de operaciones de baloncesto al legendario Larry Bird, se desprendió de Danny Granger, un exintegrante del Juego de Estrellas, para adquirir al defensa Evan Turner y al delantero Lavoy Allen.

Turner puede manejar el balón, algo en lo que Indiana enfrenta problemas. Pocos equipos se ven tan completos como los Pacers.

Al inicio de la jornada de anoche, Indiana compilaba marca de 44-13, la mejor de toda la NBA. Aún así, sienten el avance de Miami, colocado a dos partidos de diferencia de su puesto.

Clippers están activos

Poco a poco los dirigidos por Glenn “Doc” Rivers han sumado piezas que dan la profundidad a un equipo que arrancó la velada de anoche con foja de 40-20, líderes de la División del Pacífico y el cuarto mejor de la Conferencia del Oeste.

Los Clippers, que desde hace varias campañas son el mejor equipo en Los Ángeles, puesto que han arrebatado a los Lakers, se hicieron de los servicios de Glen Davis, a quien apodan Big Baby, que fue miembro del equipo campeón de Boston Celtics en 2008, cuyo dirigente era Rivers.

Orlando lo dejó libre, por la vía del buy out (cuando el equipo asume el pago del resto del año del jugador y en 48 horas es agente libre), y de inmediato se acercó a Los Clippers.

El veterano Hedo Torkoglu se unió a la tropa con sede en el Stapless Center y ayer Granger también pactó con los Clippers, que ahora tienen tremenda profundidad.

Ayer se informó sobre las posibilidades de que Caron Butler, dejado libre por Milwaukee Bucks, firme con Oaklahoma City Thunder, que necesita ayuda en el perímetro y debajo del palo.

No se puede perder tiempo. Los playoffs de la NBA no son para niños.

Fuente: http://www.elcaribe.com.do/2014/03/01/indiana-clippers-logran-fortalecerse