El piloto de Red Bull Racing, Sebastian Vettel, ha vuelto a hacer historia al lograr el triunfo en el pasado GP de Europa, convirtiéndose en el primer alemán en conseguirlo desde que lo hiciera Michael Schumacher en 1995 y el primer alemán en ganar en Nürburgring desde Rudolf Caracciola (1939).

Además consiguió su trigésima victoria, a sólo dos de Fernando Alonso, y está a punto de superar a Nigell Mansell, dejando atrás hace un tiempo a Jackie Stewart y Jim Clark.

Por su parte, el finlandés Kimi R‰ikkˆnen estuvo cerca de la victoria, tras una clasificación mejor de lo esperado en Lotus y en la carrera con una temperatura bien alta, tanto Kimi como Grosjean que contaban con el monoplaza más rápido en esas condiciones lograron subir al podio. La buena estrategia de parte de Red Bull y Vettel evitaron el triunfo de un Kimi que mereció el gran resultado obtenido.

Con estos resultados Ferrari y Fernando Alonso se ven obligados a no fallar, a lograr una racha de victorias que le permitan descontar la ventaja de 34 puntos que tiene Vettel. Ahora cuentan con una valiosa jornada de pruebas en Silverstone que son oportunas para trabajar en nuevas evoluciones de su monoplaza que los haga ser más rápidos.

No podemos dejar de comentar sobre los incidentes y las diferentes sanciones que se han suscitado durante todo el fin de semana. La primera sanción fue por exceso de velocidad en la calle de boxes. El piloto probador del equipo Marussia F1 Team, Rodolfo González, que tuvo la oportunidad de correr en la primera sesión de entrenamientos libres celebrada el viernes, fue detectado por el radar del pit-lane circulando con su monoplaza a 74.1 km/h, sobrepasando el límite de velocidad por tanto el equipo recibió la multa en su grado máximo, es decir, $1,000 euros.

Lo mismo ocurrió con Valtteri Bottas del equipo Williams al que le fueron impuestos $900 euros de multa en la misma sesión de entrenamientos, al haber transitado por la calle de boxes a 68.2 km/h.

En la carrera se impusieron dos sanciones, una al equipo Force India de $5,000 euros por haber permitido que su piloto, Paul Di Resta, tras el cambio de gomas, se reincorporara al carril rápido de la calle de boxes de forma insegura, ya que estaba la presencia del Toro Rosso de Jean-Eric Vergne, que en esos momentos circulaba por allí, teniendo que esquivarlo para evitar un accidente.

La otra fue el lamentable incidente que sucedió en la séptima vuelta de la carrera, la rueda derecha del monoplaza de Mark Webber se desprendió impactando en un camarógrafo de televisión, el cual debió ser retirado en camilla pero consciente para ser atendido por los servicios médicos del circuito, y posteriormente al hospital para una revisión exhaustiva con un fuerte golpe en el pecho y la cabeza. Por eso los comisarios designados por la FIA para el Gran Premio de Alemania han multado con $30,000 euros al equipo Red Bull.

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