Londres.- Otro gran golpe en Wimbledon. La estadounidense Serena Williams, Nº 1 del mundo y defensora del título, perdió con la alemana Sabine Lisicki (23ª cabeza de serie) por 6-2, 1-6 y 6-4 en los octavos de final. Así, se terminó su invicto de 34 partidos y el césped del All England Club vio despedirse a otra figura, luego de la derrota temprana de la rusa Maria Sharapova (3ª) y el abandono de la bielorrusa Victoria Azarenka (2ª).

En un partido muy cambiante, jugado con gran potencia, Serena, de 31 años, no pudo estirar su racha, ya que venía de coronarse en la arcilla de Roland Garros, en su superficie menos favorable. Y la mayoría pensó que, en pasto, en el certamen que ya la tuvo cinco veces como ganadora, podía volver a festejar, pero no fue así.

Serena, con 16 títulos de Grand Slam en su carrera, venía de llegar a las 600 victorias como profesional, pero cayó ante una agresiva Lisicki, de 23 años, quien ya había hecho ruido en este torneo en 2011, al arribar a semis. Es más: también hizo cuartos en 2009 y 2012.

Con muchos errores y mostrándose apurada, la estadounidense vio cómo se le escapó rápidamente el set inicial. La germana, con la iniciativa, no se dejó amedrentar por la presencia de la mejor del mundo, aunque en un abrir y cerrar de ojos esa ventaja se le escurrió de entre las manos, ya que Serena se recuperó y obtuvo el segundo parcial.

En el tercero y decisivo, la líder de la WTA empezó 3-0 arriba, con quiebre y muy confiada, pegándolo duro y sin dudas, como en una continuación del segundo set. Pero llegó otro quiebre de Lisicki. Y siguieron más rompimientos, alternadamente, hasta que la alemana se adelantó 5-4.

Allí dudó un poco y fue lógico, por el momento vivido, tuvo un match-point, quedó con break abajo con una doble falta y lo terminó revirtiendo con autoridad y dando el gran batacazo del torneo femenino. Claro que Lisicki tiene antecedentes de peso, en especial en Wimbledon, pero vencer a Serena no es cosa nada sencilla y aún más con la temporada que atraviesa.

En el partido, Serena sumó 7 aces y sufrió 2 dobles faltas, mientras que Lisicki terminó 10-3 en esos rubros. El diferencial de tiros ganadores y errores no forzados fue favorable para la alemana, con marca de 35-25 contra 25-23.

Un aspecto llamativo se dio en los puntos jugados en la red: allí la germana ganó el 88% (14 de 16) y la estadounidense apenas el 50% (12 de 24). En tanto, a la hora de aprovechar las chances para rompimiento también hubo una enorme diferencia: ambas quebraron 5 veces, pero tuvo 8 oportunidades la ganadora y 16 la perdedora.

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dominicanoshoy